Tenemos muchos clientes que tienen estudios fitness: estudios de entrenamiento personal, estudios de entrenamiento funcional, estudios de yoga, estudios de Pilates... y todos tienen un quebradero de cabeza tremendo: ¿cómo puedo gestionar mi negocio sin perder muchísimo tiempo?
Porque cuando tú abres un estudio fitness es porque te gusta impartir clases, entrenar a personas y lograr que se vean o se sientan mejor. Pero no piensas en facturas, dar de alta a clientes en la base de datos, atender el teléfono 24/7 o ir detrás de los clientes para recordarles que te paguen porque tú también tienes que comer.
Podríamos estar horas contándote estrategias para mejorar la gestión de tu estudio fitness y que lograses más dinero en menos tiempo, pero vamos a resumirlo en tres pasos principales:
Uno de los problemas principales de cualquier estudio fitness es que la información y la comunicación están desperdigadas entre el email, el WhatsApp de cada entrenador, la página web, los carteles del centro o incluso el propio asesor fiscal. Ten toda la info agrupada en tu software de gestión y así todos los miembros del equipo podrán tener acceso a la información actualizada en un solo momento.
También es importante que toda la comunicación salga de este mismo lugar. Da igual si es comunicación con clientes o mensajes que quieres dejar a tus compañeros para que puedan verlos cuando tengan dudas. Si todo está en un sitio, todos sabréis dónde buscarlo y será más fácil tener éxito.
Una agenda es una biblia para cualquier negocio que necesite organizarse de forma efectiva y eficaz. Por eso, todo debe estar bien recogido en la agenda: citas con clientes potenciales, clases, entrenamientos personales, vacaciones de cualquier entrenador, tareas pendientes, citas con proveedores... todo.
De esta forma, también podrás automatizar las citas con los clientes y que ellos mismos puedan reservar los huecos en la agenda, ya que la tendrás actualizada en todo momento.
Lo que no se mide no se puede mejorar, así que es importante que cada mes tengas unos objetivos medibles para ir valorando dónde falla el negocio. Dependiendo del modelo de negocio de tu estudio fitness, estos objetivos serán diferentes, pero algunos que te recomendamos son:
🎯 Nuevos clientes
🎯 Clientes potenciales vs nuevos clientes, es decir, de todos los que se han interesado en tu negocio, cuántos han acabado comprando
🎯 Bajas de clientes
🎯 Ticket medio por cliente, es decir, lo que se gasta de media un cliente en tu centro. Que luego empezamos con ofertas y promociones y de repente nadie está pagando lo que debería pagar...
🎯 Satisfacción de los clientes: ¿cuántos te recomendarían?
Podríamos incluir muchos más, pero no es necesario. Escoge los que más se adecúen a los objetivos de tu estudio fitness y hazles seguimiento de forma recurrente.
¿Quieres saber más sobre cómo mejorar la gestión de tu estudio fitness?