Cómo evitar la procrastinación si eres entrenador personal

Cuando eres entrenador personal, cada minuto significa ganar o perder dinero. Quizás has escuchado hablar de uno de los palabros de moda: procrastinación. Pues si lo has hecho, te vamos a contar cómo puedes evitarla y por qué deberías utilizar herramientas que te ayuden a mejorar tu productividad.  

Si nunca has oído hablar de procrastinación... te animamos a que la repitas unas cuantas veces sin que se te trabe la lengua (que no es tarea fácil) y sigas leyendo este post, porque vas a descubrir el nombre a uno de tus problemas y la solución. 

💡BONUS: la procrastinación también afecta a tus clientes, así que lee con atención porque también puedes descubrir técnicas para que ellos dejen de procrastinar y logren sus objetivos más rápido.  

¿Qué significa procrastinación? 

En primer lugar, exploremos el significado de procrastinación. La palabra procede del latín procrastinationem, que significa "aplazar de un día para otro" o "aplazar hasta mañana". Uy, esto empieza a sonarte, ¿verdad?  

Como se desprende de la etimología, la procrastinación consiste en aplazar las cosas. Por lo general, lo vemos como un retraso de las cosas hasta el último minuto o incluso después de su fecha límite. El típico “todavía falta mucho para el examen, ya estudiaré”. 

Para ponernos científicos, la procrastinación se describe como un fallo de autorregulación en el que las personas retrasan de forma voluntaria (pero irracional) las tareas esenciales. 

Varios estudios han tratado de entender las razones de este fenómeno, y más adelante te contamos de algunas de ellas. 

La procrastinación puede adoptar muchas formas. Aunque a menudo la asociamos con el aplazamiento de tareas laborales o escolares, puede aplicarse a cosas como las tareas cotidianas, la asistencia a citas o las conversaciones potencialmente estresantes.  

¿Por qué somos tan fans de procrastinar? 

Algunos estudios sugieren que la procrastinación afecta crónicamente a entre el 15% y el 20% de los adultos. Esta cifra aumenta enormemente en los estudiantes, donde entre el 80% y el 90% la practican en algún grado.  

¿Qué hace que la gente procrastine? Los estudios han analizado todo tipo de factores que podrían contribuir a la procrastinación. Estos factores incluyen rasgos de personalidad, estilos de toma de decisiones, perspectivas de tiempo, regulación emocional e incluso factores biológicos.  

La diferencia en la prevalencia de la procrastinación en los estudiantes y en la población general sugiere que algunos factores de situación contribuyen.   

Hay muchas pruebas anecdóticas que ofrecen varias razones para la procrastinación. Sin embargo, vamos a ver algunos de los estudios e investigaciones que sugieren más causas de procrastinación basadas en la evidencia.  

Verás que ninguno de estos factores relaciona la procrastinación con la pereza o con el autocontrol.  

 Dificultades de organización 

Los estudios han demostrado que muchos adultos con trastorno por déficit de atención/hiperactividad (TDAH) pueden tener dificultades para procrastinar. Varios factores potenciales del TDAH son relevantes en este caso, como la desorganización, el olvido, la distracción y los problemas para priorizar y gestionar el tiempo.  

Rasgos de personalidad  

Un meta-análisis de 2007 sobre la procrastinación encontró varios vínculos entre ciertos rasgos de personalidad y la procrastinación. El estudio encontró una predicción fuerte y consistente entre la procrastinación y la aversión a la tarea, la demora en la tarea, la autoeficacia y la impulsividad.  

Asimismo, la falta de conciencia, el autocontrol, la distracción, la organización y la motivación de logro también fueron predictores de la procrastinación.  

Veamos algunos de estos términos con más detalle:  

👀 Baja autoeficacia. El término autoeficacia se refiere a la creencia de una persona en su capacidad de realizar acciones para alcanzar sus objetivos. Las personas que procrastinan suelen tener una baja autoeficacia, lo que les lleva a creer que no pueden completar la tarea que tienen entre manos.  

👀 Baja concienciación. La conciencia es la capacidad de ser disciplinado, organizado, centrado, trabajador y orientado al logro. Cuanto menos concienzuda es una persona, más probable es que procrastine.  

👀 Impulsividad. Las personas impulsivas actúan por capricho sin tener en cuenta las consecuencias de sus actos. Cuanto más impulsiva es una persona, más probable es que procrastine.  

Razones biológicas

Los estudios demuestran que la estructura del cerebro puede estar relacionada con la procrastinación. Un estudio demostró que quienes procrastinan tienen estructuras cerebrales que suelen hacer que estén menos orientados al futuro. Como resultado, los procrastinadores tienen menos ganas de realizar tareas poco atractivas a corto plazo que producen recompensas a largo plazo.  

Salud mental  

Diversos problemas de salud mental suelen estar estrechamente relacionados con la procrastinación. Por ejemplo, las personas que sufren depresión suelen procrastinar muchas tareas diferentes, por complejas que sean. El tiempo dedicado a pensar en exceso puede llevar a una pérdida de confianza y concentración.  

Del mismo modo, las personas con trastornos de ansiedad posponen las tareas que quieren evitar porque son estresantes. Además, los que luchan contra el perfeccionismo (la necesidad de parecer o ser perfectos) pueden evitar tareas de las que no están seguros.  

Efectos de la procrastinación  

Centrémonos en algunos de los efectos de la procrastinación en quienes luchan contra ella. Una vez más, se han realizado bastantes investigaciones sobre el tema y hay muchas pruebas anecdóticas de los efectos de la procrastinación: 

Sentimientos negativos  

A pesar de aliviar ocasionalmente el estrés, la procrastinación tiende a hacer infeliz a la gente. Un estudio reveló que los estudiantes que procrastinan experimentan más estrés, frustración, culpa y ansiedad.  

Otros estudios han descubierto que la baja confianza en uno mismo, la infelicidad general y la baja autoestima pueden estar relacionadas con la procrastinación.  

Falta de productividad  

Por supuesto, uno de los principales problemas de posponer las cosas es que las tareas no se completan o se hacen con prisas y contienen errores. Esta productividad puede repercutir en el rendimiento académico y en el trabajo.  

Estos problemas pueden agravar aún más las cosas, añadiendo más estrés y más tareas desagradables que el procrastinador debe evitar. En última instancia, pueden perder sus objetivos, tanto en el trabajo como en la vida en general.  

Problemas de salud  

Las investigaciones han relacionado la procrastinación crónica con varios problemas de salud relacionados con el estrés. Entre estos problemas se encuentran los dolores de cabeza, el insomnio, los problemas digestivos e incluso los resfriados y la gripe. Postergar continuamente tareas importantes también puede contribuir a problemas de salud mental como la depresión, la ansiedad y el estrés.  

Tipos de procrastinación  

Dependiendo de dónde se lea, hay varios "tipos" diferentes de procrastinadores. Este intento de clasificar la procrastinación pretende ayudar a las personas a entender por qué procrastinan y cómo superar el hábito.    

Algunos investigadores han separado los tipos de procrastinadores en dos grupos:  

👤 Procrastinadores pasivos. Aquellos que retrasan las tareas porque les cuesta tomar decisiones y actuar en consecuencia.  

👤 Procrastinadores activos. Aquellos que retrasan las tareas a propósito porque creen que trabajan mejor bajo presión.  

También encontrará otras categorizaciones esbozadas por diversos expertos y profesionales, entre ellas:  

😱 Preocupado. Aquellos que posponen las cosas porque les preocupa el reto o salir de su zona de confort.  

😱 Exagerado. Aquellos que asumen demasiadas cosas y luego les cuesta encontrar el tiempo para completarlo todo.  

😱 Perfeccionista. Aquellos que evitan las tareas porque dudan de su capacidad para completarlas perfectamente.  

😱 Soñador. Aquellos que posponen las tareas porque no son buenos para concentrarse en los detalles. 

😱 Desafiante. A los que no les gusta que alguien les dicte su horario.  

😱 Creador de crisis. Los que aplazan las tareas porque prefieren trabajar bajo la presión de los plazos ajustados.  

5 consejos para evitar la procrastinación  

Si a veces luchas contra la procrastinación, los siguientes consejos pueden ayudarte a progresar y mantenerte en la tarea. Recuerda que, a veces, ser consciente del problema puede ayudarte a tomar medidas para superarlo.  

1. Establece pequeños objetivos

A menudo, la idea de completar una gran tarea puede parecer abrumadora. Llegar desde el principio hasta el final puede parecer una tarea imposible. Sin embargo, dividir esas tareas en pasos mucho más pequeños puede ser útil.  

Disponer de una lista de objetivos pequeños y alcanzables te puede ayudar a abordar cada uno de ellos por separado, lo que le permitirá avanzar gradualmente hacia su finalización. Comprender los fundamentos de la gestión de proyectos puede ayudarte a establecer estos pequeños objetivos.  

💡 CONSEJITO: aprovecha los huecos que tienes entre clientes para adelantar pequeñas tareas y quitarte de encima cosas poco importantes pero que te consumen mucho tiempo.

2. Organiza las tareas

Este punto está relacionado con el anterior. Disponer de un calendario detallado y de fechas límite para completar cada uno de los pequeños objetivos también puede mantenerte motivado para alcanzar los objetivos principales.  

Además de establecer objetivos diarios, también puedes tener objetivos semanales y mensuales que estén relacionados con ellos. Esto te da la urgencia de actuar y progresar en tu trabajo, ya sea una tarea escolar o un proyecto en tu lugar de trabajo.  

💡 CONSEJITO: puedes utilizar un software de gestión para gestionar de forma más eficiente tu agenda, ahorrar tiempo y llevar al día tus tareas.  

3. Centra tu atención

Otra forma de superar la procrastinación es centrarse en algunas de las tareas más fáciles que tienes que terminar. Si te fijas pequeños objetivos y organizas tus tareas, podrás identificar aquellas que son fáciles de terminar.  

De este modo, empezarás a ganar confianza y a tomar impulso. Centrarte en un objetivo puede ayudarte a abordar una pequeña tarea cada vez.  

💡 CONSEJITO: el día a día suele consumir tu energía y no tienes tiempo para plantearte los objetivos de tu negocio a largo plazo. Establece un rato cada semana para pensar en estrategia y poder seguir creciendo.  

4. Eliminar las distracciones

Es posible que tu entorno de trabajo o estudio no te ayude a procrastinar. Las distracciones pueden hacer descarrilar fácilmente tu progreso, ya sea tener el teléfono al lado en tu escritorio o tener la televisión encendida de fondo. Estas distracciones pueden aumentar tus niveles de estrés e incrementar la procrastinación.  

💡CONSEJITO: si unificas la comunicación de tus clientes a través de un software de gestión y dejas de recibir llamadas, WhatsApps, emails... te será mucho más fácil centrarte. 

5. Perdónate a ti mismo, que no es grave

Puede ser fácil castigarse por procrastinar. Puedes decirte a ti mismo que estás siendo perezoso o improductivo. En realidad, atacarte a ti mismo de esta manera solo sirve para que te sientas más frustrado y ansioso y no contribuye a la productividad.  

Si eres consciente de la situación, puedes desarrollar la autocompasión y el perdón. Ser amable con uno mismo no solo puede reducir la procrastinación en sí misma, sino que también puede reducir algunos de los efectos negativos de la procrastinación.  

Para terminar... 

Ahora sabes un poco más sobre las causas de la procrastinación, cómo puede afectarte y cómo puedes evitarla. Aunque la mayoría de nosotros procrastina de vez en cuando, puede ser bastante debilitante cuando se convierte en un problema crónico.  

Entender por qué procrastinas es fundamental para empezar a evitarlo. También hay herramientas que te ayudan a dejar de procrastinar, como poder tener tu agenda y tus tareas unificadas en un solo lugar y que al final del mes puedas ver cuántas has completado, cuántas te faltan y si has mejorado con respecto a meses anteriores. 

📚 BIBLIOGRAFÍA