Qué es la gymtimidación, o por qué la gente no se apunta al gimnasio

Uno de los retos del sector fitness es conseguir que la tasa de penetración aumente. Es decir, en lugar de competir por un mismo número de clientes, lo ideal sería que ese número aumentase. Si hay más personas practicando actividad física, es más fácil que todos los negocios fitness puedan sobrevivir y contribuir a crear una sociedad más saludable. 

En este artículo vamos a analizar un concepto muy relevante para este objetivo: la gymtimidación o por qué hay un cierto sector que se siente “intimidado” a la hora de apuntarse al gimnasio o a cualquier actividad física. 

¿A cuántas personas afecta la gymtimidación? 

Una encuesta reciente de OnePoll, realizada en nombre de The Gym Group (TGG), ha revelado que uno de cada tres británicos (el 33%) se siente intimidado por el gimnasio y teme sentirse fuera de lugar en él, mientras que más de la mitad de las mujeres (el 53%) no se apuntan debido a la presión percibida de llevar licra. 

 Además, la mitad de las mujeres encuestadas (52%) afirma que se toma la molestia de maquillarse. 

 Casi un tercio de las mujeres (32%) considera que la intimidación en el gimnasio es el mayor obstáculo para apuntarse, mientras que casi la mitad de las encuestadas (43%) afirma que se sentiría acomplejada por su estómago y más del 25% se siente demasiado incapaz de pensar en apuntarse. 

 La encuesta realizada a 3.000 adultos británicos de entre 18 y 60 años que no iban al gimnasio puso de manifiesto que casi una cuarta parte de los encuestados afirmaba no saber por dónde empezar en el gimnasio, y más del 29% afirmaba que no saber cómo utilizar los aparatos les había incomodado en el pasado. 

 ¿Cómo evitar la gymtimidación en tu gimnasio? 

Piensa por un momento que nunca has hecho ejercicio antes y que de repente llegas a tu gimnasio. ¿Sabrías qué hacer? ¿Sabrías por dónde empezar? ¿Te sentirías cómodo entrenando al lado de personas que llevan años haciéndolo?  

Te damos algunos consejos para que esas personas que han dado el primer paso, sigan dando muchos pasos más en tu negocio fitness: 

1. Cuando detectes que una persona es principiante, asígnale un “tutor” o un entrenador que haga un seguimiento cercano y le dedique algo más de tiempo que al resto. 
2. Intenta que pruebe actividades dirigidas que no sean demasiado exigentes, pero que le permitan socializar con otras personas del gimnasio. 
3. Muchas veces estas personas quieren mejorar su composición corporal, así que puedes aprovechar para ofrecer algún servicio complementario de nutrición o facilitarle dietas personalizadas. 
4. Si detectas que esta persona empieza a faltar varios días seguidos, ponte en contacto con ella, ya que seguramente la motivación se está desvaneciendo. Esto es algo sencillo si tienes un software de gestión que te avise cuando falta varios días consecutivos. 
5. Asegúrate de que los instructores de actividades dirigidas siempre comprueban si hay personas nuevas en clase (sin preguntar, ya que muchas veces estas personas no querrán reconocer delante de todos que es su primera vez). Además, deben ofrecer variantes de los ejercicios para todo tipo de niveles. 

Ante todo, la clave es la empatía. Si recuerdas tu primer día en el gimnasio, seguro que había muchas cosas que no entendías o que te daba vergüenza hacer... ¡no dejes que eso suceda a tus clientes!